“Nosotros, los de la calle, sabemos dos cosas: la primera es que todo lo que hacemos no puede ser más que pequeño; la segunda es que todo lo que hace Dios es grande. Saber esto nos da una gran tranquilidad al actuar.
Para Dios nada hay difícil, quien teme las dificultades es que todavía tiene demasiada confianza en sí mismo. Y puesto que encontramos en el amor una ocupación suficiente, no empleamos el tiempo en clasificar lo que es acción y lo que es oración.
Porque para nosotros, los de la calle, la oración es una acción y la acción es una oración. Nuestros pies discurren por la calle, pero nuestro corazón late con el universo entero.”
Guillermo Rovirosa (1948) Boletín III
Fotografía: Ester Medina, una familia en una zona rural de Chinandega, Nicaragua






«Todo lo que hacemos no puede ser más que pequeño» Cuanto más santo más humilde… más consciente de la propia pequeñez, de la propia pobreza. Más consciente de la omnipotencia amorosa del Señor.
«Nosotros, los de abajo» Y Rovirosa se incluye, siendo un tremendo científico y apóstol. Nunca alardea de lo increíble que es su tarea. Y por eso es santo, por su humildad. Saber esconderse para que brillen los demás, para que brille Dios…eso es lo que hacen «los de abajo »
Dichosos ellos.
¡Gracias por compartir estás palabras!