José Santos
Esperamos que este calendario, en cada cocina, en cada comedor, nos recuerde, cada día, el inmenso valor que el pan tiene y el desprecio que le dispensamos.
Como estos panes de la imagen, tirados al suelo en la calle. Que ya no le sirven al que los tuvo, y no le sirven a nadie, que no los tiene.
El pan nuestro de cada día, que no llega a todos, porque hay a muchos a los que nos sobra.
Pan que es agua, que huele a tierra y trabajo, que es semilla, esfuerzo y milagro.
Ojalá 2024, como un niño, traiga el pan y la paz bajo el brazo.
Y como decía Neruda en su “Oda al Pan”:
“Todos los seres
tendrán derecho
a la tierra y a la vida,
y así será el pan de mañana,
el pan de cada boca,
sagrado,
consagrado,
porque será el producto
de la más larga y dura
lucha humana”.
La imagen de este calendario fue una de las ganadoras del II Concurso de fotografía “La comida no se tira”.
El precio del calendario es de 1 euro.
