Los días 10 y 11 de mayo nos reunimos en la Casa Emaús para la primera parte de las jornadas de análisis y debate sobre “Retos de la Democracia”. En estas jornadas hemos tratado de acercarnos a una parte del mundo institucional, al análisis de la realidad global, a la crisis de la izquierda actual y establecer las bases de un diálogo sobre el actuar.
La parte de análisis institucional vino de la mano de Feliciano Trebolle, magistrado, que fue Presidente de la Audiencia Provincial de Valladolid. Con una amplísima experiencia jurisdiccional abordó la realidad del poder judicial en España y su encaje en la división de poderes que diseña nuestro sistema constitucional. La garantía de la democracia que supone el control de unos poderes por otros es objeto de todo tipo de ataques. En nuestro país, el cuestionamiento de papel de los jueces tiene mucho que ver con un ejecutivo que se ve acorralado por casos de corrupción y amenazas de banquillo. El oscuro mundo de los nombramientos de cargos judiciales y los proyectos de reformas legales que están sobre la mesa son un ejemplo de ello.

Por la tarde contamos con el politólogo Jasiel Paris Álvarez quien, en un primer momento, nos explicó su tesis de cómo el progresismo asesina el verdadero socialismo a través de una serie de reivindicaciones identitarias que han desdibujado las reivindicaciones de justicia social de los pobres. En este marco, se hizo un repaso histórico los puntos de encuentro entre la Doctrina Social de la Iglesia y el socialismo.
En una segunda ponencia se abordó la situación geopolítica actual. A los tambores de guerra en el mundo y al creciente número de conflictos armados debe añadirse la guerra comercial desatada que ha cambiado el tablero de poder y alianzas en el mundo. Frente a las posturas del idealismo ilusorio y el realismo descarnado hay que empezar a pensar en una nueva corriente que inspire las relaciones internacionales basada en el descomunal poder político del perdón.

Por último, la periodista y escritora Ana Iris Simón hizo una reflexión titulada “Pasolini y el Fascismo de los Antifascistas” para ayudarnos analizar el debate político actual sobre nuestra memoria histórica. La referencia del artista e intelectual italiano propició para un animado debate sobre la desorientación en la que nos encontramos actualmente para enjuiciar nuestro pasado con serenidad y así poder animar el presente y prepararnos para el futuro.
Han sido una buena forma de empezar un trabajo que continuará con las siguiente jornada de verano en el que abordaremos a fondo temas como la vivienda o la corrupción que siguen sin respuesta.